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¿Cómo puedes evitar autolesionarte?

Alternativas para evitar hacerte daño cuando tienes un mal momento
Jordi Torralbas Ortega
Jordi Torralbas Ortega
Jefe de Enfermería de Investigación y Evaluación
Hospital de la Santa Creu i Sant Pau
autolesiones

Las Autolesiones No Suicidas (ANS) son un fenómeno que cada vez está más presente entre los y las adolescentes. Se trata de una tendencia que podemos ver cuando atendemos a los adolescentes y también en los programas de prevención y promoción de la salud que se realizan en el ámbito escolar.

Las causas que los propios adolescentes esgrimen para justificar la autolesión pueden ser variadas, pero la gestión inapropiada de los sucesos vitales estresantes suelen ser el principal desencadenante.

La mayoría de las autolesiones se producen en el contexto de emociones negativas, pueden ser o no impulsivas y en muchos casos no están relacionadas con la presencia de un trastorno mental, sino con la intolerancia a la frustración y el malestar emocional relacionado con un pensamiento o una situación evaluada en términos negativos.

La propia conducta tiene, a corto plazo, un efecto relajante a nivel emocional y puede producir cierto placer por el propio acto transgresivo, aspectos que pueden contribuir a reforzar y mantener estas conductas.

En muchas ocasiones las redes sociales han contribuido a una difusión y «normalización» del acto, facilitando una exposición social con reconocimiento de las autolesiones, otorgando beneficios secundarios que refuerzan aún más la conducta. Estos refuerzos otorgan la idea de la autolesión como un método eficaz para resolver los problemas y para gestionar el estrés derivado de los mismos. En algunos casos, la autolesión puede ser también un signo de identidad, que otorga un rol de pertenencia a un determinado grupo o subcultura urbana, provocando un efecto contagio entre sus miembros.

En cualquier caso, los estudios indican que las autolesiones son uno de los factores más importantes en la realización de intentos de suicidio, si bien otras variables como los síntomas depresivos o la gravedad de la sintomatología podrían modular este riesgo.

Si tienes este problema o eres familiar de una persona que se autolesiona, te interesa saber que hay diferentes estrategias para intentar evitarlo. No todas funcionan igual puesto que los desencadenantes y motivaciones son diferentes para cada persona.

El impulso es pasajero. Piensa que, si no obedeces el impulso y esperas el tiempo suficiente, estarás mejor.

Cosas que puedes hacer mientras pasa ese tiempo del impulso para evitar autolesionarte:

  • Date una ducha. El cambio de escenario, de situación y el efecto calmante del agua caliente te ayudará a cambiar el estado de ánimo y salir del bucle.
  • Llama a un amigo o amiga y sal a caminar, a hacer ejercicio y cualquier otra actividad en la que tengas que activarte físicamente.
  • Pon tu música preferida y ponte a bailar.
  • Haz respiraciones profundas.
  • Rompe papeles, haz trozos tan pequeños como necesites.
  • Ten a mano siempre una pelota antiestrés que puedas apretar.
  • Frótate la piel con un cubito de hielo.
  • Haz una lista de los aspectos positivos de tu personalidad y tus capacidades. Pregunta a tu entorno más cercano, a familia y amistades.
    Cuando tengas la lista, póntela en tu habitación de forma bien visible y acude a ella siempre que lo necesites.
Este contenido no sustituye la labor de los equipos profesionales de la salud. Si piensas que necesitas ayuda, consulta con tu profesional de referencia.
Publicación: 23 de Julio de 2021
Última modificación: 23 de Julio de 2021

Si tienes pensamientos suicidas, pide ayuda:

También puedes comunicarte con los servicios de emergencia locales de tu zona de residencia.

Jordi Torralbas Ortega

Jordi Torralbas Ortega

Jefe de Enfermería de Investigación y Evaluación
Hospital de la Santa Creu i Sant Pau